Tijuana, Baja California, Agosto 21, 2018- Algunas cervecerías nacen por hobby, Border Psycho lo hizo con pasión, pero también con visión de negocio. Hace siete años, los socios del proyecto decidieron llevar su producto al anaquel y vivir del gusto por hacer cerveza.
Los hermanos Javier y Roberto Albarrán, dos de los fundadores de la cervecería, llegaron a Tijuana hace 25 años, tiempo después Roberto perdió su empleo, pensó en poner un negocio y se decidió por la cerveza, pero “hacerla en serio”.
La frase no sólo hace referencia a ‘cheve’ de calidad y constante lote tras lote, Bruno Arena, otro de los socios, explica que también tiene que ver con pagar impuestos, registro de marca, etiquetas, seguridad social para sus empleados y definir cuestiones como el precio del producto.
Bruno y Ramón
“Y se te va inflando el costo de tu producción, muchos cerveceros no están establecidos y cuando quieren hacerlo se dan cuenta de que no está tan fácil”, comenta.
Arena sostiene que una cervecería es un barril sin fondo, ya que siempre hay más áreas en las que invertir y crecer con recursos propios, sólo se logra con el tiempo.
“Nunca hemos pensado en desistir, ha costado mucho: familias, lágrimas y sangre. Es pasión, es gusto, es un barril sin fondo este negocio, siempre que llegas a tu tope de producción dices que quieres más porque ya abrió otro bar o una cadena de supermercados”, detalla.
Javier está a cargo de la producción, Roberto del área administrativa y Bruno de las ventas. Sólo el primero conserva un empleo alterno. Aunque la idea del negocio cervecero estuvo en su mente desde el inicio, fue hace tres años que lograron ponerse un sueldo y dos de ellos ya viven de la cerveza.
“Cualquiera puede hacer cerveza, pero que la hagas constante y con la misma calidad es el reto y objetivo”, afirma Bruno.
Dice que el equilibro entre la pasión y el negocio, sólo se logra creciendo en producción.
En septiembre Border Psycho aumentará 15 por ciento su producción, con la llegada de un tanque de 30 BBL’s, que reforzará su presencia en anaquel. Actualmente están en 17 Calimax en Baja California, así como en City Market, algunos Sorianas a nivel nacional y La Belga.
En Baja California tienen tres puntos de venta propios: Plaza Fiesta y Border Cantina en la Revolución (ambos en Tijuana), así como una barra en Ensenada y están por abrir la segunda en el Lucky Irish 4, que compartirán con Escafandra.
“Querer crecer con tus propios recursos es muy lento y complicado, tuvimos que vender un equipo más pequeño (10 BBL’s) nos falta una embotelladora. El dilema es si crecer en producción o invertirle a la calidad de la cerveza”, refiere Bruno.
A la fecha tienen cuatro empleados fijos y diez temporales, que les ayudan a embotellar y embarrilar su cerveza.
Bruno asegura que las grandes cerveceras no han llamado a su puerta y tampoco esperan que ocurra, “estamos disfrutando lo que hacemos, pero es mentir que esto no es trabajo y que sólo lo hago por pasión, todo empleo tiene que ser remunerado”
Hacemos lo que nos gusta: Roberto
Roberto Albarrán relata que cuando decidieron invertir en una cervecería ninguno sabía de producción, pero Javier es sommelier y se encargó de crear las recetas que hoy son ejecutadas por Ramón, cervecero de BP. Ambos son personas exigentes y perfeccionistas, cuidadosos en los detalles, la higiene y documentan cada paso del proceso, “si no nos gusta no lo vendemos”, precisa Roberto.
Dice que la mejor recomendación es la que se da de boca en boca, por lo que su interés no se enfoca en participar en competencias para posicionarse en el mercado.
“Reconocemos el mérito de quienes han ganado, pero no es nuestra estrategia, si produjéramos más tener medallas sería una herramienta de marketing para ayudar a desplazar el producto”, indica.
Albarrán considera que la principal ventaja de los cerveceros de Baja California es la asesoría de productores experimentados, principalmente de San Diego y el acceso a capacitación en el país vecino.
Lanzamiento de whisky de malta
El whisky elaborado con la Brutal Imperial Stout, será lanzado este viernes y se realizó en colaboración con Enmienda 18 de Tijuana, quienes producen vodkas y ginebras.
El evento será amenizado por un DJ y se renovará la exposición que alojan en el segundo piso de Border Psycho Cantina (ubicada en el 821 de avenida Revolución), con la del artista Miguel Ángel Íñiguez, llamada Jaque Mate.
